Aventura en la Selva Central

HISTORIA DE LOS COLONOS

El artífice de la inmigración austroalemana fue Kuno Damián Freiherr (Barón) de Schutz-Holzhausen. Nacido en Camberg (ducado de Nassau) el 15 de febrero de 1825, católico, estudió en las universidades de Viena y Heidelberg y se especializó en agricultura y administración en Gissen. En 1853 llegó al Callao, como una escala para su destino Chile, país que en ese entonces incentivaba la inmigración alemana al sur. En Lima conoce a Manuel Tirado, ministro de relaciones exteriores, quien le propone establecer sus colonias en la vertiente oriental de la Cordillera de los Andes, se les ofreció un ferrocarril desde la costa hasta un rio navegable que terminara en el Atlántico. En ese entonces, el Perú pasaba por el boom económico del guano.

En 1853, Schutz fue naturalizado y recorre el Amazonas desde Caballococha hasta Manaos junto con Manuel Tirado, el 4 de junio de 1853, se firma el convenio para traer 13000 colonos a la llanura amazónica. Que fue rubricado por el presidente Echenique. Cuando se organizaba el reclutamiento en Europa, una revolución en Perú destituye el presidente asumiendo Ramón Castilla. Los barcos que trasladarían a los colonos por los ríos no eran buenos para este propósito.

Se cantaba ésta canción anónima, en las zonas donde se reclutaban :

Ya no se puede vivir en nuestra patria Tirol
y por eso nos llaman los peruanos.
allá cada uno recibe sesenta yugadas y dinero,
por eso tomad vuestro bastón de viaje e idos al Perú.

Si uno tiene quince hijos y está más pobre que una rata,
tiene que hacer las maletas diciendo adiós a la miseria.
que se vaya a américa donde hay pan en abundancia,
por eso tomad vuestro bastón de viaje e idos al Perú.

El contrato es renegociado, al fallecer su socio el minero Manuel Ijurra y por incumplimiento de fechas, se establece que serían 10,000 los colonos en 6 años, en zonas no muy alejadas de las poblaciones establecidas, todos debían ser robustos, de buenas costumbres y de religión católica romana. El gobierno debía pagar el pasaje hasta el Callao, proporcionar semillas y víveres durante el primer semestre que deberían devolver en 5 años y recibirían 30 pesos por colono. Se establecía como lugar de asentamiento Pozuzo en la confluencia entre los ríos Delfín y Huancabamba. Se establecía un sueldo de 2,400 pesos anuales y 140 leguas cuadradas por a la colonia, este contrato fue firmado por Ramón Castilla, presidente del Perú y Juan Manuel del Mar. En el primer contrato se establecía las llanuras amazónicas como lugar se colonización, cerca de Moyobamba, se hicieron dos intentos en 1851 y 1852, las cuales fracasaron, y que fueron llevadas a cabo por Rodulfo Antolin, lo que motivo el cambio del lugar. Con este contrato viajó a Europa a reclutar colonos, pero las noticias de los fracasos anteriores ya eran conocidos y encontró mucha hostilidad, pero Schutz, era un idealista y buscaba un país donde su gente pueda desarrollarse conservando sus costumbres. No pudo reclutar en Hesse, Renania y Nassau, donde la prensa atacó duramente este proyecto orientando su reclutamiento a la región del Tirol, que no estaba incluida en sus planes, y donde si obtuvo apoyo. La inanición, la tuberculosis, el servicio militar y los impuestos, los decretos que favorecían a los hijos primogénitos y no al resto, las trabas matrimoniales que impedían este derecho a quien no tuviese terrenos, fueron el detonante para la emigración. Fue el padre benedictino Agustin Scherer quien le presenta a Joseph Egg capellán del pueblo de Imst en el Alto Inn. Entonces se dirige a Silz, población azotada por la pobreza, donde inicia su reclutamiento. En 1857, ya contaba con 180 tiroleses de Haiming, Zams, Silz, Wipptal, Stubaital y 20 campesinos de Voraderberg, viajan por tren a Augsburg pasan a Stuttgart y Koblenz, aquí se les unen 160 renanos (de Mosela, Hesse, Nassau, Camberg y Briedel) guiados por el padre Joseph Uberlinger, continuaron su viaje a Colonia por el rio Rin y luego a Antwert donde conocieron a Schutz, quien los embarco en el guanero ingles Norton con dirección al Callao, mientras Schutz viajó en vapor hasta Panamá y luego al Callao para anticiparse a los colonos y preparar su arribo, al final los que se embarcaron fueron 304 entre 184 austríacos y 120 renanos, aquel 2 de abril de 1857. para los Tiroleses estaba vigente la ley de 1832 que le quitaba la nacionalidad austriaca a quienes se iban al extranjero con intenciones de no regresar. Dos adultos y seis niños murieron en el viaje por mar al Perú, según informa el padre José Egg.

NUESTRA TRAVESIA ACTUALMENTE

Partimos aquel día, era sábado 11 de junio 2011, cuando salimos de Lima, conocíamos muy poco acerca de nuestro destino, quizás algunas amistades por las redes sociales, y unas cuantas fotos, en las que no se veía gran cosa de las poblaciones que encontraríamos.

Casi nada de historia, publicada en la Web, y muy poca referencia de la ruta, en Lima se conoce muy escasamente acerca de Pozuzo y muchos no tienen ni idea de su existencia.

La Oroya

Luego de pasar por la congestión ocasionada por la construcción del bypass en la Carretera Central a la altura de la desembocadura con la Autopista Ramiro Prialé, que nos demoró dos horas adicionales, entre cientos de vehículos que como nosotros buscaban salir de Lima, todo siguió normalmente hasta La Oroya, por donde, ya estuve en otras ocasiones, camino a otros destinos, tomé la ruta a Cerro de Pasco y en el trayecto hay que seguir el desvió a Tarma. Esta última, es una ciudad interesante pero muy descuidada, ruidosa y un poco sucia; sin embargo, la Iglesia o Catedral de Santa Ana es muy hermosa.

Catedral de Santa Ana

Costado y espalda de la Catedral de Tarma

Si bien es cierto no entramos porque estaba cerrada en ese momento, en su interior se guardan los restos del personaje predilecto de esta población el General Manuel A. Odría. Dicen que la Semana Santa se festeja aquí a lo grande. Sus elefantiásicas dimensiones de verdad que impresionan y su estilo neoclásico, es bastante conservador para quien está acostumbrado a ver templos de estilo rococo o churrigueresco.

Esta ciudad se encuentra a 3050 msnm, por lo que es recomendable tomar un mate caliente de coca. El pan es agradable, el Manjar Blanco y los quesos son muy buenos.

En 1956, durante el gobierno del General Manuel A. Odría, tarmeño de nacimiento se llevaron a cabo una serie de contrucciones como un hotel de turistas, el palacio municipal, un hospital regional en un edificio de 7 pisos, un mercado modelo, una nueva catedral, etc. Y además tienen un estadio muy interesante, nada mal para una ciudad de mediano tamaño.

Estadio de Tarma

Salimos de Tarma, sólo estuvimos unas cuantas horas del sábado, y el domingo a primera hora continuamos el viaje, contamos para tal con un Nissan Ad Wagon 98, con motor gasolinero de 1300 cc, llantas nuevas aro 14, dos (2) cámaras digitales de 14 megapixeles y una filmadora. Llevamos todo el tiempo con nosotros una gran dotación de agua embazada. Y muchos Cds de música. Una NetBook Dell con doble núcleo, para documentar la travesía y almacenar las fotos. Y muchísimos MP3. Lentes oscuros para evitar el cansancio de la vista por el reflejo del sol. Mucha ropa. Algunas latas de atún. Una vez en Tarma, pronto se hizo de noche por lo que desidimos dormir allí, el cielo dejó ver millones de estrellas en el firmamento.

Carretera a La Merced y cerca una curva con gradiente

La carretera a San Ramón y luego a La Merced está muy buena y las curvas tienen gradiente, lo que permite tomarlas con algo de velocidad sin temor a voltearse o irse al abismo; sin embargo, hay que tener cuidado, vimos un accidente que nos dejó los pelos de punta.

Luego de un corto recorrido, llegamos a San Ramón, que es una pequeña población muy trabajadora y está entre las de mayor productividad en el país, camino a La Merced. Cuenta con muchos comercios y pocos hospedajes, aunque algunos son muy buenos. No vinos mucho de esta población sólo estamos de paso.

Y luego, llegamos a la ciudad de La Merced, es una población muy grande y con un sondeo de mi Netbook, pudimos detectar muchísimas redes wifi, hay muchos comercios, el clima es muy agradable, llueve regularmente; pero no es muy abundante, dicen que las lluvias duran como máximo un par de horas y aunque el chubasco moja todo, pronto se seca. Aquí viven muchos huancainos y tarmeños que pefieren venir a esta ciudad por su agradable clima.

Plaza de Armas de La Merced

Municipalidad de La Merced, es muy moderna y grande

Modernas calles en La Merced

El Convento María Auxiliadora en la Merced.

Saliendo de La Merced, la pista asfaltada continúa a Satipo, y un desvío con una pista afirmada en dirección a Oxapampa; sin embargo, este tramo ya está por asfaltarse, y es un pequeño trayecto que pasa por un poblado llamado San Luis de Shuaro.

Carretera La Merced, San Luis de Shuaro y cercanias a Oxapampa

San Luis de Shuaro

Sólo 5 minutos bastan y sobran para recorrer la población que es muy pequeña y luego continuar el viaje.

Plaza de Armas de San Luis de Shuaro

LLEGADA DE LOS COLONOS (DE LIMA A POZUZO)

Describen al viaje marítimo, como duro pero soportable pasaron más de 3 meses, exactamente 113 días de viaje y el 21 de julio de 1857 llegan al Callao, a este grupo se unieron los marinos que eran parte de la tripulación, pasaron 3 días de cuarentena en la Isla San Lorenzo, mientras tanto Schutz, que llegó 2 meses antes se había enterado que el camino prometido de Cerro de Pasco a Pozuzo no se había construido, como se indicaba en el contrato, debido a que el prefecto Salcedo había gastado el dinero en armas debido al estallido de una revolución. Schutz decide proseguir con la colonización, fletando el vapor Inca, con sus propios fondos, para llevar a los colonos a Huacho debido a que empresarios peruanos y alemanes en Lima esperaban el desembarco de estos para ofrecerles trabajo y de ser así la colonización hubiera sido un fracaso. Llegan a Huacho el 26 de Julio, donde se aprovisionan y consiguen animales de carga, eran 300 inmigrantes y 400 bestias de carga. Para emprender un largo camino que duró nada menos que dos años, hasta Pozuzo. En un mes de camino llegan a Cerro de Pasco, aquí con el apoyo de un médico del lugar se les da alojamiento y Juan José Salcedo, el Prefecto que se gastó los fondos para la construcción del camino pretende acuñar monedas de plata conmemorativas de la inmigración, algunos se consiguen trabajo y otros se casan, otros regresaron a Lima abandonado al grupo, pasan a la Hacienda La Quinua, en el valle del Rio Huallaga (3700m) y luego a San Rafael (2700m).

Luego en setiembre llegan a Acobamba, donde se termina el camino, y los marinos provocan el descontento moral, separándose un grupo de 70 colonos, los que interpusieron una denuncia contra el Baron Cosme Damian (Schutz), y se presentó el Prefecto de Cerro de Pasco manifestándole que había sido nombrado administrador de los colonos. El Baron Cosme Damian (Schutz) viajó a Lima para desmentir las calumnias por incumplimiento de contrato y peculado y de haber vendido a los colonos a los hacendados locales, no siendo escuchado despojándose de sus derecho otorgados en el contrato, encargando al Padre Egg ponerse al frente del grupo. Quedando bajo la merced de un administrador criollo con la más mínima intensión de cumplir el contrato. En este momento otros colonos abandonaron y hasta huyeron.

Posteriormente la situación mejoró por cuanto los víveres llegaban oportunamente y recibían 40 centavos de peso como jornal, los indígenas estaban encargados por el gobierno de llevar los víveres; sin embargo, estos muchas veces huían dejando los víveres abandonados. Llegaron a Santa Cruz donde tuvieron que acampar debido a que ésta es parte de la Ceja de Selva y a partir de esta zona no existía camino construyendo viviendas rústicas, en este lugar tuvieron que alimentarse hasta de carne de sus perros. Se divide el grupo en dos, uno que continúa la construcción del camino y otro que se abre paso en la selva que en mayo de 1858 llegan a Pozuzo. El 28 de febrero del 1859 a las 9 pm, hubo una avalancha que mató a 6 personas del grupo (3 adultos y 3 niños), por lo que en este lugar hay un cementerio alemán. A consecuencia de estos incidentes un grupo de 50 colonos encabezados por el Padre Luis Uberlinger, decidió separarse, algunos se fueron a Huánuco y otros se fueron a Iquique, ya sólo eran 112 colonos de los que 60 eran tiroleses. Pasaron catorce meses desde mayo 1858 hasta julio de 1859, cuando el grupo mayor pasó de Santa Cruz a Pozuzo.

Debido a problemas entre tiroleses y prusianos durante el trayecto, se estableció la parte sur e izquierda del río Huancabamba, para los Prusianos (actualmente Prusia) y desde la confluencia del río Huancabamba con el rio Santa Cruz para los Tiroleses, hasta la quebrada de Piedras Oscuras (o Río Límite).

Comenzando nuevamente su vida bajo condiciones de extrema pobreza abandonados por el gobierno peruano aunque este afirmaba lo contario.

Desde su salida de Amberes con 304 inmigrantes, hasta su llegada definitiva a Pozuzo, habían fallecido 35, 120 abandonaron el grupo, nacieron 15 bebes, en total según el padre Egg en marzo 1859 eran 165 personas.

LLEGANDO A OXAPAMPA (ACTUALMENTE EN NUESTRO VIAJE)

Al poco tiempo, se puede continuar por una carretera asfaltada hasta llegar a Oxapampa, es muy grato encontrarte en el camino con casas como estas :

Y entonces, pasando el letrero que te da la bienvenida a Oxapampa, te encuentras con una ciudad ordenada, limpia y con casas muy bonitas, es como llegar a Austria o Alemania (nos dicen que Pozuzo es mejor en cuanto a casas típicas), esta ciudad tiene avenidas amplias y semáforos computarizados, como los que usamos en Lima, algunos están apagados porque aquí no hay congestión, hay pocas agencias bancarias (no hay agencia del Banco Continental) y los comercios no están bien dotados, las líneas de internet wifi son muy escazas y las cabinas de internet son algo lentas; sin embargo, muchos tienen cable satelital, hay buenos hospedajes y con cochera, pocos restaurantes uno de los mejores es Italos, donde sirven parrilladas con sabores típicos.

Llegando a Oxapampa

Calles a la entrada de la ciudad

La vista muestra una panorámica de la Plaza de Armas de Oxapampa, con su exhuberante vegetación que esconde tras de si, una bella iglesia de madera, al costado un boulevard y la única estación de bomberos voluntarios de la ciudad.

Plaza de Armas

Esta es la Iglesia Santa Rosa de Lima de Oxapampa, personalmente estoy en desacuerdo con la modificación efectuada a su fachada, la cual presentaba color blanco con ribetes verdes, propios de la época en la que fue construida y de acuerdo a sus costumbres, y que hace poco fuera raspada y laqueada por orden y antojo del padre a cargo, que para variar ni siquiera es descendiente de colonos, y con muy escasa cultura. El INC (Instituto Nacional de Cultura) debería ampliar su cobetura a esta región y proteger estos valores de la ignorancia y el desprecio a una cultura que no entienden, por que la herencia historica de un pueblo no se raspa ni se modifica; además, hay una construcción que actualmente se está realizando al costado de esta joya, la cual tampoco debió aprobar la Municipalidad de Oxapampa.

 Allí está la puerta principal de la iglesia.

Así es el interior de la Iglesia, que fue construida en 1939 por Otto Müller Plofm.

 La Estación de Bomberos.

  

El Boulevard de Oxapampa, aun espera la decisión del alcalde para poder montar diversos proyectos que incentiven el turismo, aquí está el puesto de Artesanía y Guía Turístico de Willy, quien nos llevó a conocer diversos lugares antes de salir a Pozuzo. recién vamos por nuestro tercer dia de viaje, y no salimos de nuestro asombro por cada cosa que vemos y eso que aun nos falta mucho que visitar.

Fábrica de Productos Lácteos en Oxapampa, aquí venden quesos de diversas calidades, se puede observar todo el proceso de fabricación y te permiten degustar. Y comprar lo que te guste, sus productos son de primera calidad. Son de mejor calidad de los que se venden en Lima en los grandes supermercados. Y sus precios son muy comodos.

 Vista del proceso de fabricación desde la segunda planta donde hay una gran ventana.

Camino al mirador, se puede ir a pie desde la ciudad o en auto hasta muy cerca, luego hay que subir un corto trecho, la vista es muy buena.

 Panorámica de Chontabamba y Oxapampa.

El recorrido por los alrededores de Oxapampa incluye el Criadero de Truchas, sólo tienes que pagar 2 soles.

En ésta última poza, las truchas son enormes.

Luego hay una cueva, llamada la Tunqui Cueva, es necesario bajar con mucho cuidado por que normalmente está muy húmeda y con restos de escremento de los murciélagos que allí viven, por lo tanto es muy resbalosa.

Por aquí hay que bajar a la cueva.

Las galerías son de mediana embergadura y en su interior hay un tragaluz, gracias a que una enorme mole de roca que era parte del techo que en algún momento se desplomó al interior, dejando libre el paso de la luz solar al recinto; sin embargo, es mejor llevar una linterna.

Luego, para finalizar, visitamos el Wharapo, un lugar donde se extrae el jugo de la caña de azucar y del cual se hace el agua ardiente.

Allí te invitarán a degustar desde el jugo recién extraido hasta el aguardiente y la miel de caña que es muy buena.

CONTINUANDO EL VIAJE A POZUZO

Esa misma tarde, preparamos el equipaje y el vehículo y nos vamos camino a Pozuzo, eran las 12:30 del medio día, todo estaba perfecto, el sol era resplandeciente y salíamos a una hora de bajo tránsito. La carretera es lo suficientemente ancha para circular en doble sentido, en la mayor parte de la ruta hasta Huancabamba. Luego, es bastante accidentada y angosta, sólo tiene una sola vía y no es más que una trocha que es transitable en época de seca y con mucha precausión. En Oxapampa hay líneas de combis que van a Pozuzo y el pasaje cuesta 20 soles, sólo hacen tres o cuatro veces al día y si no tienen suficientes pasajeros ya no se molestan en ir.

La Municipalidad de Huancabamba.

Esta es su Plaza Principal.

En el Cementerio de Huancabamba, todavía se pueden ver las tumbas de los colonos germanos.

Esta es la carretera pasando Huancabamba, es muy irregular con profundos huecos, no se puede manejar a más de 20 km/h, a veces menos. Es muy angosta.

En este lugar Paolo, tuvo que bajar a verificar si por donde iba a pasar el automovil, era lo suficientemente seguro y no ahogue el motor. Por suerte todo salió bien, llenamos algunos huecos con piedras para facilitar el trayecto sin correr riesgos. Ya habíamos pasado 2 riachuelos de menor embergadura y más adelante tuvimos otros.

Luego la carretera tiene una superficie un poco irregular, transitable si vas despacio.

En el trayecto se observa en la orilla opuesta algunas cataratas.

Los huecos llenos de agua y lodo están por un buen tramo de la carretera, pero en Junio y Agosto, está más seca. Se hace más agreste el camino y la vegetación exhuberante te anuncia que has entrado a la Reserva Nacional Yanachaga Chemillen. Hasta ese momento pensábamos haber pasado lo más difícil.

Ese día, tuvimos una dificultad que nos demoraría aproximadamente una hora de espera, por cuanto la vía estaba con gran cantidad de barro y grandes piedras, esperamos un tractor nivelador que luego hizo impecablemente su trabajo.

Nuestro vehículo a un costado de la vía

Ya anteriormente, tuvimos que bajar del auto a remover piedras llenas de barro con nuestras propias manos para no golpear el auto.

Niveladora arreglando la carretera

Toda esa zona de barro es conocida como la Zona de Lluvias Eternas.

En este lugar, la lluvia es inclemente y la vegetación de pronto da la sensación que se te vino la noche, un temor recorre nuestras almas, no queremos que la noche nos pille en este lugar. Felizmente el susto no dura más que unos 25 interminables minutos.

De pronto, después de 5 horas de viaje, por la carretera de curvas sinuosas, de grandes y profundos huecos, de barro profuzo y lluvia suave persistente de junio, de varios riachuelos que cruzan la vía unos más grandes que el anterior, de piedras en el camino, llegas a un tramo suave, con cielo despejado y camino firme y al fondo la entrada a Pozuzo, la colonia Austroalemana, en el Perú, te da la bienvenida.

Esta es la portada de cerca. Y unos metros más adelante...

Hay que cruzar un puente, al cual le falta un poco de mantenimiento y entonces llegas a Prusia, el viaje valió la pena, y nos costó más de 5 horas para cerca a 80 km, distancia que en Lima no duraría más de una hora, es muy hermoso lo que ves, las casas, las calles, su iglesia y su vegetación, es único. Y la población es de rasgos europeos, aunque en los últimos años ha experimentado inmigrantes andinos y algo de mestizaje.

Puente de ingreso

A unos metros de cruzar el puente, te encuentras con esta bella vista es Prusia, el lugar que corresponde a los renanos o alemanes. Los Tiroleses estaban más al norte cruzando el Rio Límite.

Prusia

La iglesia de Prusia es nueva, pero guarda el orden arquitectónico de la zona y sus costumbres. Tienen buenas pistas de concreto. Inmediatamente me percaté que TELEFONICA MOVISTAR no tiene cobertura aquí, pero si la tiene CLARO, realmente es decepcionante que la empresa de comunicaciones más importante del país, no te sirva de nada en esta bella ciudad. Felizmente tengo esos celulares de doble chip y no estaré del todo incomunicado, en cuanto a la televisión, sólo hay 2 canales de señal abierta y la recepción no es muy buena. Pero no importa, quién vino aquí a ver televisión o hablar por teléfono o navegar en internet. Mejor para mí así, ya no recibiré llamadas porque todos saben mi otro número, ni veré mi correo ni el bendito Facebook. Después de dar un par de miradas por allí, me doy cuenta que esto va estar muy interesante.

Vista de la Plaza de Armas de Prusia

 

Iglesia de Prusia

Las edificaciones son muy bellas, muchos jóvenes se van a Lima o a otras ciudades, para estudiar, y es muy raro que regresen. Pero si lo hacen en julio, Pozuzo se llena de gente que vuelve a su tierra para festejar su aniversario y con ellos vienen muchos austríacos, alemanes y gente de la colonia alemana en venezuela (El Tovar). Personalmente a mi me gusta más Pozuzo, tiene su magia, si bien es cierto en El Tovar, hay edificaciones muy hermosas, en ningún lugar hay el misticismo que tiene Pozuzo, no sólamente es alemán también es austríaco y eso le da un mayor valor. Aquí se hablan las dos lenguas la alemana y la tirolesa (dialecto austríaco) y por supuesto el español, además muchos de los descendientes de los colonos también hablan quechua (lengua nativa, anterior a los incas e idioma oficial del imperio y a la llegada de los europeos a América).

De la población de Prusia, tienes que continuar por una carretera afirmada y en perfecto estado con dirección al Centro, además es de doble sentido y se llega a Pozuzo, tras un corto rrecorrido.

Una vez en el Centro de Pozuzo, ubicas la Plaza de Armas, que es muy exhuberante en adornos, recién hace dos años están asfaltadas las calles, la ciudad es muy pequeña, pero muy hermosa; además, es extremadamente limpia y ordenada. Su gente es muy educada, todos se saludan, no es necesario los vehículos, aunque todos manejan moto, desde los niños en el colegio a los 9 años. Nadie utiliza casco (eso está muy mal, pensé desde mi primer día aquí) ni existe restricciones de edad en el manejo, sólo hay que seguir sus estrictas normas. Ya nos ganó la noche.

Por las tardes, no se permite hacer bulla, nosotros llegamos a esta ciudad con el equipo de sonido a volumen bastante alto, la música era nuestra compañera de viaje. La gente nos mira al llegar, es la bulla que hace el vehículo en una población muy apacible, pronto hubo que bajar el volumen al percatarnos de la molestia que ocasiona, aunque nadie nos haya puesto mala cara.

Me parece que en esta estatua han querido sintetizar la tenacidad de un pueblo.

Compartiamos el alojamiento con un matrimonio Walter Grasser austríaco y Melania Vargas peruana, andaban recorriendo esta zona, de esta manera nos hicimos amigos y compañeros de aventura con ellos fuimos a recorrer el museo, los alrededores, a probar la comida nativa y a compartir experiencias.

Al dia siguiente, salimos en un city tour por los alrededores. Pudimos observar la confluencia de los ríos Huancabamba y Santa Cruz (se trata de un río de agua dulce y otro de agua salada) para formar el río Pozuzo. Allí se pueden pescar los famosos Pacos, son peces muy agradables, del tamaño de una Chita que comemos en Lima, aunque estoy seguro que son más grandes, pero con un sabor ligéramente más agradable.

En el trayecto, hay un puente colgante, está con algunas maderas podridas y tengo entendido que le dan mantenimiento cada cierto tiempo, de no ser asi, ya hubiera desaparecido hace mucho.

Aquí estoy con José Schaus Kohel (Schilling), un pozuzino, dueño del alojamiento y nuestro guía y un buen amigo.

En el recorrido, visitamos la casa típica de María Egg, esta casa conserva muchas de sus características de la época de los colonos intacta, tiene 4 pisos. Es una construcción muy cómoda y todo un rascacielos en medio de la selva.

En su interior, hay varias joyas de la época como esta mesa familar y sus sillas y en la que para su construcción no se han utilizado clavos metálicos, sino tarugos de madera.

Este artefacto es muy complejo y es para la carpintería.

Una fotografia familar.

La casa cuenta con balcones y sus techos tienen calaminas de madera tratada.

En las cercanias, había un pequeño panal de unas abejas de la región que dicen produce una miel muy buena, las abejitas son pequeñitas.

Y continuando, llegamos al Mirador de los Gallitos de la Rocas, es el ave nacional del Perú, una vez que se llega a la estancia, hay que caminar siguiendo ciertas reglas de conducta para no alterar el ecosistema y a las aves, descendiendo a un riachuelo y cruzarlo, para luego internarse dentro del pequeño bosque que es el que se observa al fondo de la fotografía, hay sillas donde puedes verlos y fotografiarlos a partir de las 3:00 de la tarde, el costo del recorrido es de 15 soles por persona, a esto debes agregar el esfuerzo de bajar y subir la quebrada donde ellos reposan. Y luego regresar por el mismo camino, continuamdo el trayecto seguimos hasta un desvio que termina finalmente en Prusia. Lo recomendable es hacerlo a pie, es una verdadera y muy agradable aventura.

Este es el riachuelo, sólo hay que contar con un poco de equilibrio para no terminar en el agua, aunque no ahogaría a nadie, si te mojaría unos 15 ó 20 centímetros, me imagino que en época de lluvia debe ser muy diferente.

Y aquí apreciamos al Gallito de la Rocas o Tunqui en quechua. Su nombre científico es Rupicola Peruviana, es un ave en peligro de extinción.

Terminado nuestro recorrido nos fuimos al Museo Schafferer.

 

Donde se guardan las pertenecias de los primeros colonos, como utensilios de cosina, fotografías, las primeras radios, armas.

La Señora Eva Solleder fue nuestra guía de lujo.

Esta cama de la época, no utiliza clavos metálicos, sinó tarugos de madera.

Algunas armas de la época y una trampa con disparador automático para cazar. También hay objetos preincas y hasta incas encontrados en los alrededores que aquí se conservan.

El Puente Emperador Guillermo I, es el inicio de un recorrido a pie por una serie de vistas paisajísticas, el puente es muy bonito. Se mueve mucho cuando caminas por él. A la derecha hay un croquis de la ruta.

Y como poquísimas poblaciones en el interior del país, Pozuzo tiene una Casa de La Cultura.

Luego, encontrarás el Cementerio de los Colonos, donde está la tumba del padre José Egg y otros notables de la población ya nadie más se entierra aquí y es un lugar muy respetado y que se conserva muy bien, aquí se nota como esta población aprecia su pasado, algo poco común en el resto del Perú.

La casa del fondo a la izquierda es la única agencia bancaria que hay en la ciudad, y es del Banco de la Nación. Felízmente en algo el Estado Peruano se acordó de esta población. Es una construcción nueva y es evidente que respeta la arquitectura local.

La Iglesia Sagrado Corazón de Jesús está en la Plaza de Armas. Fué construida utilizando ladrillos y madera, en 1963.

En la Plaza de Armas, hay un gran barco de madera, es una especie de geleón del siglo XVI, la verdad no se que hace allí, pero es un buen juguete para los niños y una forma de utilizar la materia prima que aquí sobra, la madera.

Hay un lugar muy divertido y se llama Pozas del Guacamayo, que son formaciones de pozas en una pequeña quebrada por la que circula un riachuelo, en el cual uno se puede bañar. En esta casita que es la recepción hay un restaurant donde también puedes alojarte, además de comer o tomar algún jugo entre ellos el de naranjito (fruta de la zona) que voy a extrañar.

Es un lugar de verdadero relax, tiene un  puente colgante al que cruzas y a unos metros están las pozas, son como piscinas, realmente es un spa natural y el ingreso a todo esto sólo cuesta 4 soles.

Estoy encantado de la paz que se respira por todas partes y de la belleza de la naturaleza, la arquitectura y su gente.

Las casas siguen siendo bonitas por donde vayas, ojalá en todo el país tuvieran el mismo gusto. El Perú sería otro.

Así son sus calles con pistas asfaltadas, veredas bien hechas, mucho cesped, nuy poco movimiento de vehículos, paz y tranquilidad, extremadamente limpio, no hay zancudos. El clima puede estar sobre los 30 grados, pero no lo sientes porque el aire es muy fresco.

Hasta cuentan con un Internado Parroquial.

La Iglesia San José, fue la primera construida en el año 1875. Utilizándose para tal madera, piedra, cal y material noble. Antes de esta era un centro de oración con paredes y techo de palma.

Un centro de salud.

En sus calles no hay congestión vehicular como la de Lima, y algunos días nosotros teníamos el único vehículo de cuatro ruedas circulando en la ciudad. Los colegios son buenos están bien dotados el Tupac Amaru en el centro y el Von Humbolt en Prusia, ambos enseñan alemán, aunque no cuentan con las horas necesarias. Y los jovenes terminando el colegio se aventuran a salir fuera a seguir estudios o cambiar de vida atraidos por la vida citadina. Lima es uno de sus destinos predilectos, la gran mayoría no regresan. Ojalá se creen centros de trabajo y se abran nuevas oportunidades laborales y de estudio, porque Pozuzo dejará de existir sin su gente, los descendientes de los colonos.

El alojamiento Schilling, es muy cómodo, su dueño es José Schaus, quien nos hizo de guía, sólo le falta televisión, internet y algunas veces se corta la corriente y no puedes usar tu laptop. Aquí hacen su propio pan y hay una bodega en la primera planta. Tiene estacionamiento si llevas vehículo.

Alojamiento Schilling

EL SEGUNDO GRUPO DE INMIGRANTES

Luego de unos años de permanecer en Pozuzo, la población de colonos se percata de las enormes cualidades que le ofrece esta tierra, una vez ya asentados, el padre José Egg en mayo de 1864, solicita mediante carta al presidente de la república una segunda migración a cargo del Barón Schutz, finalmente Mariano Ignacio Prado en 1867, firma un contrato de colonización con el Cónsul Peruano en Ginebra Juan P Martin y el Cónsul en Amberes Santiago Scotland, el grupo debía constar de 500 colonos; sin embargo, se embarcaron 321 colonos, en su mayoría Tiroleses pero también bávaros, embarcándose en el barco italiano Valparaiso el 21 de marzo 1868, éstos siguieron la ruta Huacho, Oyon, Yanahuanca, Ambo, Huánuco, Panao, Chaglla, Muña y Pozuzo. Esta ruta era conocida como la ruta de los arrieros.

Al Perú llegaron 315 colonos, debido a que fallecieron 14 y nacieron 8, el viaje a Pozuzo duró 2 meses y medio y arribaron a la ciudad sólo 180 en setiembre de 1868. Ya que muchos murieron y otros desertaron como lo que sucedió en la primera oleada. El lugar destinado para estos era Mayro. Desde Pozuzo salió un grupo de familias a colonizar Chuchuras (1868) y luego Villa Rica (1928) y Santa Rosa (1940), en 1967 inician la colonización del Codo del Pozuzo.

Los Misioneros Combonianos en el Perú, tuvieron el encargo en 1938 de esta zona como su primera participación pastoral. Un comerciante judío-alemán Juan Rener en 1859 les donó 180 cabezas de ganado, en 1974 recién se construye la carretera a Pozuzo, esta población se mantuvo mientras tanto aislada y abandonada durante todo este tiempo desde su fundación.

EL RETORNO A LIMA

Y llegó el domingo 19 de junio, partimos en la mañana, el viernes y sábado estuvo lloviendo mucho, así es que nuestro temor era el estado de la carretera de Pozuzo a Oxapampa, ese día estaba despejado y había un sol radiante, la tristeza nos embarga, uno no quiere irse de aquí, llegamos a Lima el Lunes por la tarde, luego de pernoctar en La Merced. Otra vez la congestión y las combis, hace frio y hay una horrible llovizna, el cielo es gris, son las 2 de la tarde y ya parece que va anochecer. Tengo que acostumbarme que ahora estoy otra vez en Lima.

RECOMENDACIONES

Para comer bien y muy rico, visita el Típico Pozuzino y también es muy bueno Maldonado.

La cerveza que produce en su pequeña planta, Enzo es buenísima, la encuentras al frente del alojamiento Schilling.

Recorre los alrededores y si puedes la Catarata Delfin y la Hidroeléctrica.

Respeta el ecosistema, los animales e insectos, no los mates.

No tires basura ni hagas bulla, a la gente le gusta la calma.

No te lleves nada que no hayas comprado, saluda a todos.

A MIS AMIGOS

Paolo Mejía

José Schaus Köhel (Schilling) y Norma

Melania

Walter

Manuel

Henry

Elizabeth

Willy (Guia en Oxapampa)
A mis amigas en las redes sociales que con sus fotos me animaron a ir.

A la pareja de austríacos en moto que nos mostraron sus aventuras.

Y a todo el pueblo de Pozuzo y Oxapampa.

A todos ellos, mi agradecimiento eterno, ya programaré otra visita a esta población extendiendo mi recorrido por Santa Rosa, Codo del Pozuzo y Villa Rica.


Puedes ver tambien : http://rinconeslima.blogspot.com/